Clásico renovado

Hola chic@s , esta semana se me ha pasado volando. Y es que entre intentar sacar un número decente de horas de estudio e intentar darme algún caprichito para sobrellevar mejor lo anterior, pues ha llegado el domingo.

Como el tiempo está todavía muy agradable para salir, el miércoles por la tarde aproveché para quedar con una amiga a la que tenía muchas ganas de volver a ver y nos dimos una vueltita por Zara de Nuevos Ministerios, al que yo todavía no había ido. No me gustaron demasiado las prendas que vi, pero sí piqué con un vaquero pitillo negro y con este vestido.

Pero lo voy a devolver porque no me acaba de convencer para mí.

Por la noche fuimos a cenar a   The Geographic Club     (C/ Alacalá, 141) ya que nos habían informado de que habían renovado radicalmente su carta.Muchos conoceréis este lugar como un sitio clásico en Madrid para tomar copas y degustar comida america. No en vano  fueron   pioneros en servir este tipo de comida en la capital.Pero ahora han apostado por una cocina mediterránea que, en contraste con su decoración al más puro estilo de club londinense, da como resultado una propuesta gastronómica muy interesante y apta para todos los públicos.

Por cierto, aproveché para estrenar el bolso de plumas de Roberto Verino que conseguí a tan buen precio en las rebajas de verano. Y lo cierto es que me parece precioso.

Entre los platos que degustamos se encuentra el timbal de boletus edulis, foie, aceite de trufa negra, huevo y bravas. Un plato precioso, original y muy sabroso.

También nos decidimos por la merluza de pincho a la marinera con gambones y almejas. Todo un clásico, que gracias a una excelente materia prima y a su acertada elaboración, fue todo un acierto.

 Nosotros no queríamos, pero no pudimos resistirnos a tomar su tarta de chocolate. La imagen lo dice todo.

Espero que podáis conocer muy pronto The Geographic Club y disfrutar de una velada muy agradable.