La intangibilidad

Cuando la vida de una persona está tan limitada en algunos aspectos como lo está la de un/a opositor/a, no puede una dejar de preguntarse ciertas cuestiones.

Una de las que más me preocupan a mí es la intangibilidad de mi éxito o, dicho de otro modo, cómo mido mi avance en la vida, qué termómetro uso cuando la única información que recibo viene de mi misma ("hoy lo he hecho bien" "hoy ha sido un desastre"...).

Cuando iba al colegio,instituto y universidad estaban los exámenes mediante los cuales podía saber si estaba haciendo lo correcto.
Durante los años de instituto y uni hubo otros momentos en los que también pude medir ese avance en otras ocasiones: aprobar el FIRST, sacar el carnet de conducir, el premio naranja en un campamento de inglés en Manchester.

Cuando encontré mi primer trabajo supongo que también fue una manera de avanzar y medir el éxito.

Pero, ¿y ahora? ¿Qué parámetros son los correctos para medir mi éxito?.¿Es tan intangible el éxito de un opositor como a veces a mí me lo parece?.
Algunos días mi éxito radica simplemente en estudiar, no tener pensamientos negativos y no ponerme de hidratos hasta las cejas.

Cierto es, que en mi caso particular el haber renunciado a mi trabajo relacionado con lo que estudié, que para más inri fue filología. Y dada la situación económica actual , ayuda mucho a que la gente te tome por loca.
Aunque casi mejor los comentarios del gran público los voy a dejar para otra entrada...

Comentarios

  1. Los comentarios de la gente alejada al mundo opositoril dan para una larga entrada... que digo entrada, para un libro!!!

    El simple hecho de cumplir el horario establecido, aprenderte un tema mas o menos bien, hacer esquemas / apuntes que nos ayuden a comprender la materia, etc todo eso son logros. Pequeños logros que nos llevaran al éxito o simplemente a ser mas constantes y a tener las ideas mas claras ;)

    Me suscribo a tu blog

    Un beso y mucho animo!!

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    Respuestas
    1. Totalmente de acuerdo. Los de fuera muchas veces se podían estar calladitos...
      Yo sigo con mis pequeñas batallas diarias.
      Gracias por leerme y por comentar.

      Muchísimo ánimo, no estás sola.

      Un beso!

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